domingo, 1 de septiembre de 2019

El avión de Stroessner duerme sobre los cerros de Pirayú



El Electra C de LAP llevó en 1973 al dictador a Europa y África. Antes de volverse chatarra, fue rescatado por un ex miembro de su tripulación.

Andrés Colmán Gutiérrez - @andrescolman

Fotos: Desirée Esquivel

La larga estructura cilíndrica aparece de pronto, en medio de un claro de bosque, al final de un serpenteante camino de tierra que sube por las laderas de verdes cerros, desde la ruta entre Pirayú y Caacupé, en la compañía Cerro Verá, no muy lejos del humilde rancho donde nació el héroe guerrero José Eduvigis Díaz.
La escena parece salida de una película de Werner Herzog, un barco varado en medio del desierto o de la selva, en este caso, los restos de un enorme avión sobre los desolados cerros de Pirayú. Sobre su estructura polvorienta y despintada alcanza a leerse: Líneas Aéreas Paraguayas, la legendaria aerolínea que fundó el régimen del general Alfredo Stroessner (1954-1989) y que con sus luces y sombras es considerada la etapa más consistente de la aviación en el Paraguay.

LEYENDAS. ¿Cómo llegó el avión hasta aquí? Lacú Ramírez, poblador campesino, prefiere compartir un relato mítico en guaraní: hace años la aeronave tuvo que aterrizar de emergencia en el descampado y desde entonces nunca más pudo salir. Él no lo vio, pero así le contaron.
La versión real es menos fantástica. Mario Medina, concejal municipal de Pirayú, directivo de la academia PZ Flight, formadora de pilotos y tripulantes de vuelo, vio un día de 2017 que un grupo de obreros estaba empezando a cortar el fuselaje de un viejo avión Electra C de LAP, tirado en inmediaciones del aeropuerto.
“Ya le habían cortado las alas e iban a convertirlo en chatarra. Ese avión era el ZP-CBY, que en julio de 1973 llevó al entonces presidente Stroessner y varias personas de su gobierno a una gira oficial por Europa y África. Planteé que nos permitan usarlo para ejercicios de adiestramiento de nuestra academia y me lo permitieron”, relata Medina.
El concejal conoce bien al avión, porque fue parte de su tripulación, llegando a ocupar el puesto de comisario a bordo. “Le tenemos mucho cariño a esta verdadera reliquia de la aviación paraguaya”, dice.
Tuvieron que partirlo en dos para trasladar el fuselaje hasta la propiedad de su familia, en Cerro Verá, donde planea reconstruirlo, tanto para ejercicios de supervivencia en la selva, como para instaurar un sitio de atracción turística.

HISTÓRICO VUELO. El Lockheed L-188C Electra, con capacidad para 84 pasajeros, perteneció primero a la aerolínea norteamericana Eastern. La empresa LAP lo compró en 1969. Con matrícula ZP-CBY empezó a operar realizando vuelos a São Paulo, Brasil, con tres frecuencias semanales.
El 14 de julio de 1973 llevó al dictador Alfredo Stroessner y gente del Gobierno a una de las más grandes giras en busca de apoyo internacional. En España fue recibido por el dictador Francisco Franco.
Stroessner buscó ser recibido oficialmente en Alemania, la tierra de sus ancestros, pero solo pudo ser invitado oficioso en el estado de Baviera por el ministro Alfons Gopel, donde además conoció a sus primos Heinz Stroessner y Gustav Unger. El Gobierno alemán ya le requería que entregue al criminal de guerra nazi Josef Mengele, que obtuvo la nacionalidad paraguaya, pero el dictador se hacía el desentendido.
En cambio, sí pudo ser recibido por el presidente italiano Giovanni Leone en Roma y por el papa Pablo VI en Castelgandolfo. Además, el avión estuvo en Portugal, Francia, Marruecos, Cabo Verde, Islas Canarias y Recife.
Ahora el fuselaje todavía bastante deteriorado es admirado por excursionistas que montan campamentos juveniles a su alrededor y se hacen selfies, recreando un escenario que parece de posguerra nuclear.
Entre los hierros retorcidos duermen las historias.











Curso de sobrevivencia para futuros pilotos y azafatas, usando la estructura del avión rescatado. (Foto gentileza: Mario Medina. PZ Flight).

El avión Electra C de Lap ZP-CBY, en el aeropuerto de Munich, durante el viaje de Stroessner a Europa y África (foto gentileza del historiador aeronáutico Tony Sapienza).